Mediante este examen, es posible estudiar cambios del ritmo, extra-sístoles, taquiarritmias, bradiarritmias y trastornos del segmento ST o realizar evaluaciones más complejas como la relacionada con la estimación del riesgo de muerte súbita. Otras utilidades son la evaluación de la eficacia farmacológica antiarrítmica, el funcionamiento de marcapasos, resincronizadores y desfibriladores y el análisis de la variabilidad de la frecuencia cardíaca.